
Cómo dejar de mirarte. Podría haberte regalado mis ojos esa noche, podría haber robado los tuyos también. Quise llevarme tu sonrisa para el camino, para la noche en que llovía, para la semana con tu ausencia…
Te sigo mirando como la primera vez…
Incrustada en la Inefabilidad, nace en primera instancia bajo presión de un profesor, para aprobar el curso. Ahora que nació, le puse el mismo nombre a este blog, con el fin de dar a conocer mi pasatiempo favorito, escribir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario