No miento.
Si mis labios y mis manos te tocan.
No miento.
Escucha mis silencios.
Oye cómo gritan te quiero.
Incrustada en la Inefabilidad, nace en primera instancia bajo presión de un profesor, para aprobar el curso. Ahora que nació, le puse el mismo nombre a este blog, con el fin de dar a conocer mi pasatiempo favorito, escribir.