jueves, 21 de abril de 2011



Nunca es suficiente. La voz que acompaña tu mirada agudizan mis sentidos y crean un espacio donde no me gusta estar. El actuar mortal es inherente para crear confusión. Lo sé y aquí no dudo.
No es suficente despertar y ansiar verte. No son suficientes cuatro noches y cinco días por las nubes. Sin embargo, es suficiente la duda para decorar aquel espacio y abrigarte si hay frío de abril.

No hay comentarios: